Hace poco leí un texto que decía algo así como “a lo largo
de tu vida podrás cambiar de ideología, de amigos e incluso de novia, pero
jamás cambiarás el amor por tu equipo”. Y no hay una verdad que refleje mejor a
la afición del Atlético de Madrid; son puro sentimiento. Temporada la que ha
empezado sin duda rara, de cambios y con situaciones no fáciles de manejar
tanto extra como deportivamente, pero con un grupo capaz de hacer que su
afición no les deje caer ni un segundo.
“Si vas perdiendo, yo más te aliento” es una de las frases
de un cántico que se escucha, ahora ya, en el Metropolitano. Y más, cuando hay
un derbi en el horizonte. Porque si algo se le tiene que venir a la cabeza a
los atléticos cuando se habla de un Atlético-Real Madrid es ese famoso partido
de Champions en el Calderón “bailando bajo la lluvia”. Los que lo presenciaron,
sobre todo, sabrán de lo que estoy hablando. De lo que aquella noche se vivió,
se sintió y jamás se olvidará. Los que perdieron en el ámbito deportivo,
ganaron en muchos otros. Y eso, en el Atleti no se cambia por nada.
Cualquier partido se vive con emoción, pero un derbi supera
en muchos casos las expectativas. Los lunes son menos lunes cuando sabes que
terminarás la semana disfrutando de ese encuentro, y no hay otra cosa que ocupe
tu cabeza hasta que llega el momento de que el balón eche a rodar. En clase, en
el trabajo, en el bar, sea donde sea hablas sobre qué once sacarán los
entrenadores, cómo llegan los equipos, quién marcará antes, incluso te atreves
a hacer porras con los amigos con el resultado final. Sin importar lo que ponga
en el marcador cuando termine el partido, tienes claro que el lunes lucirás
orgulloso, vayas donde vayas, los colores de tu equipo.
Si entramos en materia deportiva, los cara a cara de los
jugadores sobre el campo son un clásico en este tipo de partidos. Si echamos la
vista atrás, muchos recordarán aquel enfrentamiento Simeone-Michel, o uno de
los más sonados de la historia de los derbis: el protagonizado por el ahora
entrenador del Atleti con Raúl González. En los últimos años, tampoco han
pasado desapercibidos momentos de tensión en el césped como los de: Arda-James,
Diego Costa-Cristiano Ronaldo, éste último vs Koke, etc. Todos saben lo que
significa un Atlético – Real Madrid y eso se refleja en el terreno de juego.
Los últimos resultados, si a derbis nos referimos, no
favorecen al Atlético de Madrid. Pero si hay un grupo capaz de crecerse y
superar las adversidades cuando nadie se lo espera, ese es el formado por los
soldados de Simeone. Y, como no puede ser de otra forma en este tipo de
partidos, y haciendo referencia a don Luis Aragonés, ahora más que nunca solo
vale “ganar, ganar, ganar y volver a ganar”. Señores, la cuenta atrás para que
se juegue el primer derbi en el Metropolitano ha comenzado. Prietas las filas.